
La tela de lenguas mallorquina, nuevo trending topic
Solía utilizarse para tapizar cojines, para hacer cortinas o como delantales, pero la tela de lenguas mallorquinas se ha convertido en tendencia de moda y complementos que van un poco más allá de su uso doméstico.
Conocida con el nombre de roba de llengües -ropa de lenguas, en castellano – este tipo de tela es un gran ejemplo de cómo un producto artesano puede reinventarse, manteniendo su esencia artesanal primigenia.
El tejido presenta el mismo dibujo idéntico en ambas caras, de formas geométricas sencillas y difuminadas. Sus colores son vivos y, aunque ahora se pueden encontrar en abundancia, antiguamente solían predominar las de color azul, procedentes del antiguo índigo natural.
La técnica del Ikat para la tela de lenguas mallorquina
Los telares mallorquines fabrican, desde tiempos ancestrales, este tipo de tela siguiendo la técnica milenaria del Ikat, de origen oriental y que consiste en teñir los hilos antes de tejerlos. La Ruta de la Seda fue la responsable de que llegara a Europa y en Francia se hizo especialmente popular.
Cuando estalló la Revolución Francesa, muchos de los artesanos que habían adoptado el Ikat como su principal técnica de manufactura, eligieron Mallorca como lugar de refugio, y trajeron consigo todos los secretos de esta tela.
Desde el siglo XVIII se sabe que se utilizaba para tapizar muebles o como revestimiento de paredes en las grandes casas señoriales mallorquinas. El rastro de las lenguas llega hasta el siglo XIX en forma de tejidos de algodón para hacer cortinas, cojines, paños de cocina, delantales o pantallas de lámpara. En el año 2022 se hizo un lugar predominante en el diseño, tanto de interior como de complementos y ropa.
Las lenguas, que recuerdan a sus homónimas de fuego en llamaradas, se consiguen al teñir los hilos siguiendo un patrón, que recuerda al tie-dye. De hecho, el artesano ata las hebras con algodón encerado para dar color a la tela, según el diseño previsto, pero también para impedir que éste invada las zonas no deseadas.
Se trata de una técnica complicada, ya que el artista tiene que saber exactamente dónde atar para realizar el dibujo, que se complica cuando intervienen más colores, o las formas son más abstractas.
La nueva época dorada de la roba de llengües
La tradición ha dado paso a la modernidad y la tela de lenguas ya no sólo se encuentra vistiendo el interior de las casas mallorquinas.
Los nuevos diseños y colores están presentes en numerosas revistas de decoración e interiorismo, o en proyectos que quieren rescatar el sabor mediterráneo de estas telas que ya, incluso, forman parte de complementos como bolsos, monederos, carteras o mochilas.
El éxito de la tela de lenguas es tal que firmas como Gucci, Marc Jacobs, Dries Van Noten o Balenciaga las han incluido en sus colecciones, haciendo que se infiltren en pasarelas de moda, salones de alta costura y talleres de diseñadores e interioristas de todo el mundo.
Aún existen numerosos telares en los que se fabrica la tela de lenguas, y es posible visitarlos para conocer de primera mano esta técnica y admirar sus resultados. Algunos de ellos están en Pollença, Lloseta o Santa María del Camí.
Los mercados semanales de Mallorca son otro de los lugares en los que encontrar todo tipo de productos realizados con este tipo de tela.