Vacaciones familiares en mallorca: los mejores planes
El destino turístico por excelencia del Mediterráneo es elegido cada año por miles de familias dispuestas a disfrutar de todo lo que Mallorca puede ofrecer. Excursiones a la playa, visitas a las reservas naturales, paseos por los diferentes centros históricos de cada localidad… Son algunas de las más populares. Sin embargo, es posible salirse de la norma básica y programar unas vacaciones en familia, con los mejores planes. Aquí destacamos algunos de ellos.
Pasar un día en Cabrera
Cabrera es uno de los pocos refugios vírgenes que quedan en el Mediterráneo. Pasar un día en este islote, disfrutando de sus aguas cristalinas, los fondos casi intactos o sus acantilados y calas es un plan fantástico para disfrutar en familia.
El barco que lleva a Cabrera parte de la Colonia de Sant Jordi y ofrece diferentes posibilidades, como realizar la ruta cultural de la isla, hacer snorkel, ver el atardecer en la mítica Cueva Azul, o pasar el día descubriendo la isla, en tierra o en el mar.
Visitando el subsuelo de Mallorca
¿Sabías que Mallorca tiene cuevas subterráneas? Hay hasta cinco, y todas ellas ofrecen visitas impresionantes y muy fresquitas, ya que la temperatura en el interior de la tierra suele rondar los 18º.
Las Cuevas de Artá presumen de tener la llamada “Reina de los pilares”, una enorme estalagmita de 22 metros de altura, totalmente excepcional en el mundo de la espeleología. Por su parte, las Cuevas del Drach poseen el lago Martel, el más grande conocido en Europa, y donde tiene lugar un maravilloso espectáculo musical.
En las cuevas dels Hams -anzuelos en castellano- el visitante puede disfrutar de todo un espectáculo de luces y música, y de proyecciones sobre la pantalla de piedra de una de sus entradas.
La última cueva es la de Campanet, donde reina la calma y el silencio, y donde, además, las maravillosas vistas del paisaje son un plus.
A todo gas y sobre cuatro ruedas
Otro de los lugares que proporciona diversión para toda la familia, subidón de adrenalina incluido- es el Karting. En Magaluf existe uno que dispone de minikarts para los niños a partir de tres años, karts para adolescentes, y karts de carreras para adultos.
Además, y para niños mayores de ocho años, hay una autoescuela en la que los niños pueden aprender a conducir, bajo la atenta mirada de los profesores, profesionales en la conducción de estos vehículos.
Y por las noches…
El verano mallorquín está repleto de fiestas populares, que tienen en el atardecer y en la noche, sus momentos más álgidos. Los enfrentamientos dramatizados de moros y cristianos empiezan en mayo y se alargan hasta finales de septiembre en muchas de las localidades de la costa, pero también hay fiestas del melón en Villafranca, las del soltero en Moscari, las carreras de Joyas del pueblo de Alaró…
Y las numerosas cenas y verbenas que tienen lugar en las plazas principales de los pueblos.
Mallorca es una isla que sorprende por la variedad de su oferta turística y de ocio, especialmente si se viaja a ella en familia, y se dispone de varios días para recorrer sus mejores propuestas.
