Conoce el centro de recuperación de tortugas marinas en Mallorca
¿Sabes qué tienes que hacer si encuentras una tortuga marina, un cetáceo o un tiburón heridos? No, no tienes que tratar de ayudarlos por tu cuenta porque puede ser peligroso para ti y perjudicial para el animal, que no va a entender que estás tratando de echarle una mano. Lo que hay que hacer es llamar al 112 para informar de dónde te encuentras y qué clase de animal está en peligro.
En Mallorca existen varias fundaciones que responden casi al momento para acudir en auxilio del animal en problemas y, en caso necesario, trasladarlo a sus dependencias para curarlo y cuidarlo hasta que esté en condiciones óptimas para regresar al mar.
El centro de rescate de tortugas marinas de la fundación Palma Aquarium
Desde el año 2014 la fundación Palma Aquarium colabora con el Servicio de Protección de Especies y el Consorcio de Recuperación de Fauna de las Islas Baleares (COFIB) para atender a las tortugas y otros animales varados o heridos.
Normalmente las causas de varamiento se deben a incidencias con aparejos de pesca, ya sea en capturas accidentales del palangre o por el enmallamiento.
La responsabilidad de todos los organismos implicados es trasladar a estos animales a las instalaciones de Palma Aquarium para curarlas y mantenerlas en observación. El objetivo final es conseguir que recuperen la salud hasta el punto de poder regresar a su hábitat natural y desenvolverse en él por si mismas y sin problemas.
Entre los años 2015 y 2019 se han devuelto casi un centenar de tortugas al mar, en perfecto estado de salud.
La labor realizada por la fundación Marineland
Durante muchos años la fundación Marineland ha trabajado en la recuperación de especies endémicas de baleares como el ferreret, un pequeño sapo que se descubrió en una cueva de a Tramontana, pero también se ha dedicado a curar y liberar tortugas marinas.
Esta fundación fue pionera en este sentido ya que todos los animales heridos llegaban a sus instalaciones para ser curados y recuperarse de sus heridas para luego ser devueltos al mar.
Cada año los veterinarios de Marineland aprovechaban los meses de verano para mostrar su trabajo a los medios de comunicación, soltando tortugas en diferentes puntos de Mallorca, aunque la suelta más esperada es la que tenía lugar en Cabrera.
Las tortugas que hay en el mediterráneo son de la especie caretta caretta, también conocidas como “tortuga boba”. Se trata de animales de tamaño medio que pueden llegar a medir 120 centímetros desde la cabeza hasta el final del caparazón y pensar unos 200 kilos.
Su cabeza es muy grande y el cuello y el pico son muy robustos. Suelen ser de color marrón con bordes rojizos y anaranjados y el vientre es más bien blanquecino con tonos amarillo pálido.
Es el depredador natural de las medusas y no suele verse muy amenazada en el mediterráneo, salvo por las redes, los plásticos y las mallas de los pescadores.
Los veterinarios y expertos aconsejan no acercarse nunca a uno de estos animales, aunque parezca cordial, y no tratar de ayudarlo bajo ningún concepto.
¿Quieres conocer el mar de las islas más de cerca? Visita esta entrada y te contamos cómo.
