
Rutas de cicloturismo para recorrer Mallorca
Tenemos las mejores rutas de cicloturismo para vivir la más perfecta aventura ciclista en Mallorca. Mezclaremos paisajes impresionantes, terrenos para todos los niveles y paseos por el paraíso mallorquín que no dejarán indiferente a ningún aficionado a este deporte.
¿Preparados? En La Pérgola nos encanta ser punto de partida de todas estas excursiones en bicicleta, y también de ser el destino de los ciclistas, para recuperar fuerzas, darse un baño o disfrutar de los beneficios del spa, pero antes… hay que sudarlo.
De Andratx a Pollença
Partimos de Andratx para hacer la primera de las excursiones y ya os adelantamos que serán unos 43 kilómetros, junto con un ascenso de 120. Si no estáis muy acostumbrados a hacer deporte o a practicar cicloturismo os aconsejamos elegir otra ruta o parar cuando ya no podáis más.
Este es uno de los trayectos más populares de la isla, y transcurre a través de la carretera MA-10, que va recorriendo la Sierra de Tramontana, y desde donde se pueden avistar paisajes increíbles de la costa mallorquina.
La ruta se complementa partiendo del puerto de Andratx y hacia Valldemosa, un camino que vale la pena hacer despacio para disfrutar de los pueblecitos que se levantan bajo las montañas y de las vistas al mar.
De Valldemosa a Sóller
Si después de visitar Valldemosa en la anterior ruta os quedáis con ganas de ver un poco más de este pueblo de montaña, os aconsejamos el camino de cicloturismo que parte desde aquí y se dirige hacia Sóller.
Es un trayecto por carretera casi obligatorio para los amantes del ciclismo, y muy recomendable por las vistas al campo y por sus escaladas desafiantes. Se trata de una de las mejores excursiones en bicicleta y una gran oportunidad para conocer los enclaves más pintorescos que unen ambas localidades.
Del puerto de Sóller a la Calobra
Un clásico donde los haya. Desde el puerto de Sóller a la Calobra, los ciclistas recorrerán algunos de los lugares más populares de la isla. En esta ruta no apta para todos los públicos, se atraviesa el Puig Major y el famoso Coll des Reis.
La Calobra y sus 26 curvas cerradas merece mención aparte porque en ellas se mezclan la emoción del trayecto y el respeto por una carretera que se lleva en el corazón de cualquier ciclista aficionado que la haya realizado. Desde aquí se vislumbran las colinas verdes, casi sumergiéndose en el mar, y se pueden otear pueblos tan bonitos y pintorescos como Deià.
De Pollença al cabo de Formentor
Partiendo del puerto de Pollença hacia el cabo de Formentor se puede vivir una de las más emocionantes experiencias del ciclismo. Son unos 20 kilómetros, asumibles para prácticamente cualquier aficionado a este deporte, que empiezan en el puerto.
Esta zona de Mallorca es muy popular por su particular encanto y porque es el punto de encuentro de los cuatro vientos mediterráneos. Además, tiene ascensos desafiantes para poner a prueba a los más experimentados.
La costa, desde la carretera, asume toda una paleta de colores sea cual sea la hora del día, convirtiendo este camino en un recuerdo imborrable.