
Productos típicos de Mallorca para comprar como recuerdo
No hay viaje que se precie sin un recuerdo o regalo de la ciudad visitada. Y, si bien es cierto que se suelen asociar los souvenirs con objetos poco prácticos que acabarán en el fondo de algún armario, desde La Pérgola tenemos la solución.
Una pista: no hay necesidad de recurrir al típico cliché de la flamenca y el toro encima de la tele. La esencia mallorquina reside en muchos rincones, objetos y productos que, una vez en casa, os harán recordar los días azules y salados.
Desde La Pérgola os recomendamos productos típicos de Mallorca para comprar como recuerdo. Productos especiales que, de una manera u otra, hablan de las raíces, de la tierra y la tradición.
1) Sobrasada: no hay viaje a Mallorca que se precie sin probar una buena sobrasada, uno de los productos estrella de la gastronomía balear. Este embutido, elaborado a partir de carne seleccionada del cerdo y condimentado con sal, pimentón y pimienta negra, es perfecto para poder empaquetar en la maleta y seguir disfrutándolo en casa. A diferencia de otros productos, como la ensaimada, no es un producto perecedero con lo que es perfecto para llevarse un pedacito de Mallorca hasta casa. Es un producto versátil, duradero y muy muy sabroso. Os recomendamos las sobrasadas de Can Company.
2) Siurell: si además de los productos gastronómicos queréis llevar algún objeto para vuestra casa, el siurell es el recuerdo perfecto. Se trata de una figura pintada de blanco con rayas verdes y rojas que lleva incorporado un silbato. Normalmente son figuras humanas que representan payeses con o sin animales. Antiguamente se usaban en el campo para controlar a los animales pero ahora se ha convertido en un objeto de decoración de lo más peculiar.
3) Tela de roba de llengues: la tela mallorquina por excelencia es la tela comúnmente conocida como roba de llengos. Es un tejido con estampados de varios colores. Es muy común utilizarlo en cojines, manteles, cortinas o delantales. Os recomendamos hacer una visita a Teixits Vicens, en Pollença, tienen cosas tan bonitas que no sabréis con qué quedaros.
4) Barro cocido: si sois de los que disfrutan coleccionando piezas de menaje en sus viajes por el mundo, Mallorca es vuestro paraíso. Platos, vasos, fuentes y diferentes artículos de barro cocido diversos colores y texturas. Una de nuestras tiendas favoritas para comprar platos únicos es Terra Cuita.
5) Senalla paja: uno no es plenamente mallorquín al 100% hasta que no reconoce que la senalla mallorquina de paja es el mejor bolso del mundo. Artesanía de palmito trenzado a mano que, con diferentes formas y acabados, nos acompaña desde hace cientos de años a todos los mallorquines. Ideal para ir a la compra, a la playa, a la piscina. Para utilizar como bolso o como mochila. El complemento ideal para todos los días del año.
Como veis, hay muchas opciones para volver a casa sin demasiada añoranza del paraíso mallorquín. ¿Ya sabéis por cuál os vais a inclinar?