
Mallorca es un paraíso también en invierno
Los días se acortan, las temperaturas se moderan, la luz adquiere una tonalidad cálida y suave: Ha llegado el invierno a Mallorca, la época ideal para disfrutar de las alegrías y bellezas que ofrece esta isla más allá del sol y playa…
Un paseo solitario por la playa
… aunque ello no significa que haya que renunciar del todo a las playas. Un paseo por una de las kilométricas playas de arena de Mallorca en invierno estimula los sentidos a la vez que ejercita la musculatura. El sonido de las olas, el olor a mar, la luz – todo se percibe muy diferente al verano- más cercano a la naturaleza; y lo disfrutamos prácticamente en exclusiva.
Recorrer la isla en bicicleta
Ciclistas de todo el mundo llegan a Mallorca durante todo el año, aunque indudablemente, la época ideal para recorrer las carreteras de la Isla son los meses de menos calor. En Puerto de Andratx como punto de partida, tenemos la posibilidad de enfrentarnos a rutas exigentes por la Serra de Tramuntana, o de pasear por las carreteras costeras. Nuestras diferentes rutas y packs de entreno del Hotel Pérgola ofrecen las mejores opciones para todos los ciclistas, desde los más ‘pros’ hasta los grupos de amigos que quieran sobre todo disfrutar.
Disfrutar la gastronomía
Pasear por las playas, recorrer Mallorca en bicicleta, o hacer una excursión a pie por la maravillosa Serra de Tramuntana, por ejemplo, a La Trapa o al Castell d’Alaró abre el apetito. Ningún problema, porque Mallorca es conocida y apreciada por su gastronomía que ofrece un amplio abanico de estilos: Desde la cocina tradicional isleña – las Sopas Mallorquinas o un sabroso Arros Brut son algunos de los típicos platos de invierno-; pasando por la cocina desenfadada al estilo bistro y una gran variedad de restaurantes con especialidades de todo el mundo; hasta las maravillas culinarias que sirven los nueve restaurantes de la Isla distinguidos con un total de diez estrellas Michelin.
Mientras que, en verano, lo que más apetece es disfrutar de una deliciosa comida o cena al lado del mar, en invierno nos atraen también los locales del interior de la isla. Podemos elegir entre restaurantes situados en los pueblos más céntricos de Mallorca que sirven especialidades como “porcella” al horno de leña; “Cellers” tradicionales, donde podemos comer platos típicos de la cocina isleña; o restaurantes que nos deleitan con sofisticadas creaciones internacionales. Mallorca desde luego es un paraíso culinario, también y especialmente en invierno.
Ferias y mercados con producto de temporada
Y es que el invierno es la mejor temporada para disfrutar algunos de los productos más típicos y propios de Mallorca. Muchos de ellos tienen sus propias ferias, como el pimentón, la aceituna y el aceite de oliva, el arroz de Sa Pobla, la lecha de almendras… y muchas más. Mallorca también es tierra de cultivo de cítricos. Paseando por los mercados que cada semana tienen lugar en las diferentes localidades de la Isla, se puede contemplar una asombrosa abundancia de sabrosas naranjas, clementinas y mandarinas. El olor de la piel de cítrico es uno de los olores más típicos del invierno mallorquín.